¿Diesel o Gasolina?

¿Diésel o gasolina? Muchas personas tienen esta duda antes de comprarse un nuevo coche, y se les puede aconsejar desde el taller. El año pasado, las ventas de coches de gasolina en Europa superaron por primera vez desde 2009 a las de vehículos diésel. De entre las principales razones, destacan los acontecimientos relacionados con el “dieselgate” de VW o las restricciones de circulación que implantan cada vez más ciudades a nivel europeo.

Causas del estancamiento en las ventas de vehículos diésel

Haciendo un análisis un poco más profundo, se pueden encontrar otros motivos que parecen indicar que los vehículos diésel han llegado a su techo de desarrollo, y que explican por qué están perdiendo terreno respecto a los motores de gasolina:

  • El precio de un vehículo diésel sigue siendo más alto que el precio de uno de gasolina. De hecho, el mismo modelo diésel cuesta una media de 2000 euros más.
  • El mantenimiento correctivo de un vehículo diésel es más caro, sobre todo debido a que suelen contar con sistemas más complejos para el control de emisiones, como los filtros antipartículas con regeneración o los catalizadores de reducción selectiva. Además, en los vehículos diésel, existe una mayor tendencia de componentes como la EGR o el catalizador a acumular hollín.  Algunas fuentes calculan que el mantenimiento de un diésel a lo largo de su vida útil es entre 300 y 700 euros más caro.
  • Los seguros de los vehículos diésel siguen siendo un poco más caros que los del mismo modelo en gasolina: una media de un 13%.

Ventajas de los motores diésel

A pesar del descenso en ventas, los coches diésel también tienen una serie de ventajas respecto a los de gasolina:

  • El consumo de combustible es inferior. Aunque en los últimos años se están desarrollando motores de gasolina con consumos muy ajustados, todavía no se puede asemejar a la eficiencia de los diésel.
  • El precio del gasoil es menor que el de la gasolina, lo cual es otro factor que se suma a la eficiencia global de este tipo de combustible.
  • Algunos conductores prefieren la respuesta al volante de los diésel, ya que ofrecen una mayor recuperación y un buen par motor a bajas revoluciones. Esto es así en los vehículos diésel sobrealimentados (en la actualidad, todos los que salen al mercado lo están).

Elección entre diésel o gasolina: consejo para el profesional del taller

La mejor respuesta para un cliente que pregunte sobre si es mejor un coche diésel o uno a gasolina es “depende de cuánto lo vayas a usar”:

Según Mapfre, un coche diésel empieza a ser amortizado a partir de los 100.000-150.000 km. Y va un poco más allá, señala que los diésel están indicados para personas que hagan al menos 25.000 km al año. Para los que hagan alrededor de 10.000 km al año es preferible un modelo de gasolina.

En cualquier caso, ambos sistemas de propulsión se enfrentan a un futuro incierto, y aunque es difícil de predecir lo que puede ocurrir en los próximos años, lo más probable es que tanto el diésel como la gasolina vayan perdiendo cuota de mercado ante la paulatina consolidación de otros sistemas alternativos, como es el caso de los vehículos eléctricos o híbridos, o los propulsados por gas GLP o GNC. Además, los cambios en materia de legislación medioambiental parecen ir en esta misma dirección, en detrimento de los combustibles tradicionales.

Como consejo final, cabe decir que es importante estar al día de la evolución del sector y de las tendencias e intenciones de compra de los clientes. De esta manera, será más fácil adaptarse a los cambios, sea cual sea la tecnología que incorpore su vehículo.

Tweet about this on TwitterPin on PinterestShare on LinkedInShare on Facebook
www.tecnicosenautomocion.com